EL ESTABLECIMIENTO EDUCATIVO PERTENECIENTE AL COMPLEJO JOSÉ MANUEL ESTRADA.

La educación consignamos desde siempre en EPOCA, es uno de los bastiones fundamentales de en la vida de las sociedades en el mundo entero. Es el trampolín esencial al crecimiento en la vida y a la apertura de posibilidades y a la evolución como seres humanos. En Capilla del Señor, entre las propuestas educativas existentes, se encuentra el Colegio del Sol, integrante del Complejo Educativo José Manuel Estrada.

El frente de las actuales instalaciones donde funcionan el Colegio del Sol y el Jardín Semillitas.

El Colegio ha cumplido 25 años el pasado 7 de marzo, y la fiesta aniversario tuvo lugar el 29 de noviembre último, una buena oportunidad para conversar con la directora, Teresa Cresmaschi sobre como se gestó, el esfuerzo cotidiano y el futuro.

-¿Cómo surgió el Colegio del Sol en Capilla del Señor?
-El Colegio del Sol inicia sus actividades el 7 de marzo de 1994 con una matrícula de 21
alumnos en primer año. El edificio del colegio, estaba ubicado en la calle Bartolomé Mitre 339 en Capilla del Señor. Se trataba de una casa que fue refaccionada y adaptada para poder brindar un espacio acorde al servicio de educación que se iniciaba. Sus fundadores y dueños fueron Donato Di Santo y su esposa, Valentina Luz Figueras.
Nuestra institución debe sus orígenes al Jardín “Semillitas”, con el que desde hace mucho, comparte edificio y forma parte del complejo educativo José Manuel Estrada. A partir del crecimiento del jardín, surgió la necesidad de continuar con la oferta educativa en el nivel EGB, y es así como se dio la creación del Colegio del Sol.
En el año 1996 se produjo un hecho importante, al trasladarse la institución a un nuevo edificio, cuando fueron adquiridas las instalaciones de la por entonces, conocida fábrica de zapatos Palmer que había cesado en su actividad. Transcurrido un año por entonces, las difíciles circunstancias económicas, pusieron a los dueños y por ende a la institución, en una muy delicada situación y con un inminente estado de cierre. Sin embargo, ante la proximidad del inicio del ciclo lectivo 1997, la Asociación Civil José Manuel Estrada, integrada por madres y padres de la comunidad educativa del Instituto José Manuel Estrada, fruto de un esfuerzo encomiable por cierto, adquirió el Jardín Semillitas y el Colegio del Sol. No fueron tiempos fáciles, pero con gran voluntad, trabajo mancomunado y dedicación el establecimiento comenzó a afianzarse, trabajando día a día como ha sido una constante para optimizar la oferta educativa, y realizando por otro lado importantes mejoras en el edificio que además, ha sido ampliado.

Aquellos comienzos en el edificio definitivo y actual, donde funcionara la fábrica de zapatos Palmer.

-Cobró impulso el proyecto educativo…
-Así es, a partir de la gestión de la Asociación Civil José M. Estrada, se le dio un nuevo impulso al proyecto educativo, y es así como se duplicó el número de alumnos, al ampliarse la posibilidad de contar con 5° Y 6° año en 1997, para lo que se abrió la inscripción. Ese resultó otro paso hacia adelante, remarcándose el trabajo mancomunado de la comunidad educativa para mejorar y adecuar la infraestructura, así que se construyeron nuevos espacios y se amplió el predio destinado para deportes, adquiriéndose un lote lindero al edificio del Colegio y el Jardín. Para que esto pudiera critalizarse, mucho tuvo que ver el aporte de las familias y de la Asociación. Unido a este esfuerzo, estuvo el apoyo valioso de la intendencia encabezada por el contador Ricardo Bozzani, y también de la inspectora Mirta Barbero y la inspectora jefe Marta Foyé. Así se logró la subvención del 80% en el año 2000, hecho muy relevante que permitió que institución pudiera continuar gestionando y creciendo año tras año como lo ha hecho, objetivo que nunca dejamos de mantener vigente.

-Después de los 25 años transcurridos, en un sector vital como es la educación, ¿qué
sensaciones pueden expresar desde el Colegio?
-Justamente conversando con Alcides Cardoso (foto portada), quien fuera durante años y hasta el año 2018, director del Colegio y quien ha sido una persona de suma importancia para la institución, me comentó una frase: “las ideas mueven al mundo sólo si se han transformado en sentimientos”. Seguramente múltiples sensaciones recorren el ser de todos aquellos que formaron, y formamos parte de esta gran familia.

-Emoción, muchos recuerdos…
-Y sí, creo que a muchos las emociones le juegan una mala pasada ante nada menos que el 25º aniversario, es imposible no sentir el sano orgullo de haber aportado un granito de arena en la construcción de esta institución. Algunos de ellos desde sus inicios, otros nos fuímos sumando y así seguramente sucederá de manera incesante…, las personas pasarán y la obra, siempre inconclusa, continuará enfrentando nuevos desafíos con otros intérpretes, pero con la misma convicción que la vio nacer: enfrentar nuevos desafíos para dar respuesta a las demandas de cada tiempo, de cada época, y así continuar insertándonos plenamente y para siempre en la rica historia educativa del partido de Exaltación de la Cruz.

Un grupo de docentes, administrativos, la directora.

-¿Cómo imaginan en el Colegio del Sol, el futuro?
-Lo imaginamos, y también en lo personal desde mi función, como un camino con un gran horizonte, demandante de ideas y proyectos y allí frente a esa realidad, me sitúo junto a la comunidad educativa dispuesta a brindar lo mejor de mi para continuar haciendo del Colegio Del Sol el mejor lugar donde se formen nuestros alumnos. Creo que de esa manera estaría y estaríamos honrando el esfuerzo de quienes a partir del año 1994, creyeron en un sueño y lo persiguieron hasta convertirlo en la realidad de la que hoy somos parte…y que es ni más ni menos que el Colegio del Sol.

-El establecimiento ha mostrado un notable crecimiento, y es reconocido por la calidad educativa y el clima receptivo que transmite, ¿a qué se apunta para continuar avanzando?
-Nuestra institución se encuentra trabajando en función de tres ejes: el desarrollo de capacidades fundamentales, aprendizaje relevante y educación para toda la vida. Los estudiantes aprenden “haciendo”, y aplicando su conocimiento a diferentes situaciones. En cada experiencia se intenta afianzar el interés por aprender durante toda la vida. Día a día trabajamos para ofrecer un espacio de encuentro, que permita dejar la individualidad y crear una comunidad de aprendizaje; y de esta manera construir una sociedad más justa y más solidaria…
Hacia esa meta nos dirigimos… Esta construcción requiere del compromiso de cada uno de nosotros, a través de una revisión constante del trabajo propio, la sensibilidad hacia la situación en el aula, una actitud creativa e innovadora de nuestras prácticas, y un trabajo en conjunto con las familias que forman parte de la comunidad del Colegio del Sol.

-¿Cuántos alumnos asisten al Colegio y en que hacen hincapié en materia educativa?
-Actualmente contamos con una matrícula de 154 alumnos y desde ya, ponemos énfasis en asumir la la responsabilidad que tenemos para ofrecer una formación integral a cada uno de nuestros alumnos, en las distintas etapas de su desarrollo, poniendo el máximo empeño en el cultivo de valores humanos y en la creación de hábitos de estudio, trabajo y convivencia para una óptima formación académica y personal, acorde a las demandas de nuestra sociedad actual.

 

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