INENTENDIBLE.
El giro de la actividad comercial en la ciudad de Capilla del Señor, pese a la crisis recurrente, demanda la prestación de servicios vitales en los tiempos que corren. Lo mismo los vecinos de la ciudad, quienes requieren de opciones para efectuar trámites y abonar servicios y otras obligaciones.
Esas necesidades encontraban respuestas parciales al menos ante el dispar funcionamiento de los puntos fijados, en los que vecinos y comerciantes podían abonar facturas de servicios, impuestos, cuotas, etc. Eran efectuadas en el punto de Pago Fácil existente en la sucursal capillense del Correo Argentino, así como en otra oficina ubicada sobre la calle céntrica Mateo S. Casco, correspondiente al Banco Provincia de Buenos Aires (Bapro), fijado luego que para efectuar este tipo de operaciones, se dejaran de abonar en la citada sucursal bancaria.
Constante fue observar largas colas en forma periódica para abonar todo tipo de facturas, en tanto el Pago Facil del Correo dejó de funcionar inexplicamente y sin que ningún responsable se inmute ante tal falencia. Ahora bien, se ha sabido que el punto establecido por el Bapro al que hacemos referencia, también ha dejado de funcionar.
De esta forma la ciudad queda húerfana y a la intemperie en cuanto a un servicio de verdadera utilidad, que al no funcionar, generó por cierto muchos perjuicios a los vecinos de Capilla del Señor, planteándose el interrogante acerca de si en otras localidades de Exaltación de la Cruz, sucederá lo mismo…
¿Habrán de tomar debida nota aquellos con injerencia en la problemática?. Mientras tanto, los vecinos a la deriva… Una vergüenza.