ATENCIÓN.
y primera demanda contra el Estado argentino y el laboratorio AstraZeneca
“Antes de aprobar una vacuna, hay que estudiarla lo suficiente para confirmar su efectividad y seguridad. Las autoridades deben evitar que la inyección contra el dengue produzca coágulos, inflamación del corazón, parálisis muscular y los demás efectos adversos graves que tuvieron las vacunas covid”, afirmó el doctor en farmacia y bioquímica de la Universidad de Buenos Aires y titular del Sindicato Argentino de Farmacéuticos y Bioquímicos (SAFYB), Marcelo Peretta.
Una damnificada cordobesa presentó la primera demanda contra el Estado argentino y el laboratorio AstraZeneca, por 90 millones de pesos, ya que asegura padecer el Síndrome de Guillain Barré (parálisis del cuerpo) tras haber recibido la vacuna contra el Covid de esa empresa. Esto sucede a días de conocerse la decisión del laboratorio inglés de sacar del mercado europeo la venta de su vacuna para Covid, Vaxzervria, tras la demanda colectiva que recibiera por 51 muertes por trombosis (coágulos) y miocarditis en el Reino Unido. El laboratorio asegura que el retiro se debió a motivos netamente comerciales, pero las dudas crecen.
“Que se aplicaran millones de dosis, y se denunciaran pocos efectos adversos, no significa que las vacunas contra el Covid fueran efectivas, porque no sabemos si la protección fue de la vacuna o de la inmunidad natural o adquirida (con la circulación y el paso del tiempo) propia de los pacientes; pero al verificarse secundarismos graves como trombosis o miocarditis, se confirmó que eran inseguras y debieron estudiarse más antes de aprobarlas”, sostuvo Peretta.
“La seguridad de una vacuna, como la de todo medicamento, se certifica por la ausencia de daños o efectos adversos, no por la presencia de beneficios. Hay cientos de medicamentos para la diabetes, artrosis u obesidad que aparecieron como la “gran” solución a problemas de salud y terminaron retirados del mercado por su peligrosidad, debiendo indemnizar a las víctimas.”
“Los sanitaristas y farmacólogos sabemos del balance riesgo / beneficio que debe regir a todo nuevo fármaco: tiene que curar sin hacer daño y si daña no puede aprobarse por más que cure”, manifestó Peretta, que además es autor de los libros “Reingeniería Farmacéutica” 1 y 2 edición, publicados por Editorial Médica Panamericana.
El experto y representante de los farmacéuticos y bioquímicos del país, considera que “la demanda cordobesa es la punta del iceberg, habrá más acciones legales contra los funcionarios que aprobaron las vacunas sin los requisitos de seguridad suficientes y contra los laboratorios que hicieron un brutal negocio con una desgracia mundial”
En este sentido, desde SAFYB recomiendan a los voceros que “antes de salir en televisión recomendando un determinado medicamento o una determinada vacuna, que no fueron suficientemente estudiados, deben comprender que además de incurrir en una falta ética, cargarán con la responsabilidad que impliquen sus apresurados consejos en línea con los perjuicios ocasionados por los fármacos que recomiendan.”
El SAFYB advierte que con la vacuna para el Dengue puede suceder lo mismo que con las vacunas para Covid, ya que aplicarlas masivamente, sin contar con los estudios y pruebas suficientes que garanticen su total seguridad, traerá consecuencias. La Comisión Nacional de Inmunizaciones (CONAIN) confirmó que no hay datos disponibles sobre campañas reactivas para frenar brotes epidémicos con la vacuna contra el dengue y que, esta estrategia, debe acompañarse con una vigilancia intensificada de la seguridad de la vacuna; además de recomendar “avanzar con los estudios económicos y de efectividad”.
“Al Dengue primero hay que atacarlo con higiene, fumigación, descacharreo, agua potable, buena alimentación y, si hace falta, paracetamol, pero no con una vacuna insegura por el solo hecho de apurar los tiempos y aprovechar una oportunidad de negocio”, finalizó el SAFYB.
Para más información: https://www.safyb.org.ar/#!/-home2/