LAS SENSACIONES DEL EX TITULAR DEL HCD Y LÍDER DE CAMBIEMOS EN EL DISTRITO.
“Ha sido un gran honor presidir el cuerpo durante dos años. Recibimos un concejo cerrado, donde todo se cocinaba entre cuatro paredes y de espaldas a la sociedad. Lo abrimos a la gente, lo hicimos protagonista de la vida institucional de Exaltación de la Cruz.
Dejó de ser una oficina utilizada como depósito, para volverse un ámbito donde cada vecino puede ir a presentar una queja, un reclamo, una idea. En 2017 cuando llegábamos se habían presentado entre 15/20 notas de vecinos, en 2018 ingresaron unas 150. Nos dijeron que estábamos convirtiéndolo en un búnker por abrirlo a los vecinos.
Dejó de ser una Escribania para volverse un ámbito de debate. Empezaron a funcionar las comisiones, que no funcionaban hacía muchos años. Dejamos de derrochar papel para modernizarnos y entregamos un Concejo en el que en cada período sobró dinero, cuidando los recursos de los vecinos.
Le agradezco personalmente al resto de los concejales en estos dos años, al concejal Pablo Modena y a la concejal Graciela Gallo que en 2017 dieron su voto para permitirme llegar a la presidencia pese a ser de partidos distintos; a Paula Faure que se hizo cargo de la Secretaría con mucha seriedad y compromiso, que nos ha dado siempre una opinión desde la experiencia y a Hernán Kunsch quien, con juventud y mucho compromiso asumió la tarea de todos los días.
A mis compañeros de bloque, Ariel Herling y Claudio González con los que hemos atravesado las buenas y las malas. Siempre defendiendo el interés de nuestro pueblo. A los vecinos que nos han apoyado tanto.
Me voy con la alegría de saber que hemos dejado huella y que el recambio siempre hace bien, que nos hace recordar que estamos siempre de paso en la función pública y que LAS INSTITUCIONES SIEMPRE SIEMPRE ESTÁN POR ARRIBA DE LAS PERSONAS.
Me quedan dos años más en el Concejo Deliberante, donde seguiremos haciendo nuestra tarea desde la oposición, pensando siempre en lo mejor para nuestro Pueblo”.
